¿Por qué hemos vuelto antes de lo previsto?
Hola guerreras! Después de unas semanas de “aterrizaje” me dispongo a contaros un resumen de mi vivencia estos meses viajando y emprendiendo por el sudeste asiático.
Sé que muchas de las que me seguís soñáis con viajar y poder llevaros el negocio/trabajo a cuestas, así que el salseo de hoy os interesa. 😝👉🏻
PEQUEÑO RESUMEN DE NUESTRA RUTA
Salimos el 14 de Enero de 2023. Hemos hecho base en 4 lugares principales, además de otras paraditas cortas de escala. Estos han sido: Tailandia, Vietnam, Sri Lanka e Indonesia.
La verdad es que no hemos podido elegir mejor los “campamento base”, así lo llamamos, y volveríamos a repetir la misma combinación.
🐘 Comenzamos por Chiang Mai, una ciudad tailandesa en el norte del país. En sus calles se puede respirar la cultura tradicional entre una vibrante comunidad de expatriados y locales. Hay muchos cafés y espacios de coworking y rápida conexión a Internet disponible en toda la ciudad, por lo que se nos hizo fácil desarrollar nuestros proyectos.
En Chiang Mai puedes disfrutar explorando los templos históricos, los mercados locales y una rica gastronomía.
🏖️ Seguimos nuestro camino en Vietnam. Tras dos paradas un poco caóticas por Hanoi y Ha Long, nos asentamos en Hoi Han. Una ciudad bonita y colorida que nos había recomendado.
Hoi An es lugar tranquilo, con pocos turistas, una amplia variedad de planes y restaurantes disponibles y muchas cafeterías para trabajar (eso para nosotros era muy importante 😁). El plus de Hoi An es la playita y su gente. Nos sentimos como en casa.
🕌 De forma improvisada, y debido a las condiciones de la visa y los vuelos, nos trasladamos hasta Sri Lanka para pasar los próximos 2 meses. No habíamos investigado la zona antes porque estábamos involucrados en los próximos retiros que estábamos organizando con nuestro proyecto Viajar con Alma y en nuestros negocios online.
Aterrizamos por la zona sur (Hikkaduwa, Ahangama y Weligama). Es la costa más turística y atractiva para nómadas digitales y surferos. Tienes un poco de todo, aunque muchas menos facilidades que Tailandia, Vietnam o Indonesia. Fue una etapa de introspección, surf y naturaleza salvaje.
🛕 Acabamos nuestra aventura en Indonesia. Bali nos acogió con los brazos abiertos, un clima exquisito y definitivamente fue nuestro destino preferido.
Sin embargo, en torno al mes 6 de la aventura viajando con la casita a cuestas sentimos que algo nos llamaba a volver a la península.
¿Qué nos estaba ocurriendo?…
LOS 4 VIAJEROS
Hay diferentes formas de viajar y diferentes tipos de viajeros. Yo los resumiría en 4 principales:
El mochilero: un alma que anhela aventura, apertura mental, abrir sus horizontes y vivir cuantas más experiencias posibles. Normalmente, tira de ahorros y se enfoca en dejarse llevar.
El viajero turístico que está de vacaciones y busca experiencias y comodidad.
El viajero perpetuo o nómada digital. Personas que gozan de un trabajo remoto o un sueldo estable que les permite cambiar de país y residencia según les apetezca.
Y la variante de este último hemos sido nosotros: los viajeros emprendedores jeje.
¿Esto qué quiere decir? Que hemos dado el salto a un nuevo estilo de vida a la par que soltábamos la seguridad del país de origen, de un sueldo fijo, un coche, amigos y todo lo familiar.
Lo que suele decirse: “salir de la zona de confort” y sin titubeos.
Durante los primeros meses, no hemos gozado de un sueldo estable, ni de suficientes ahorros, y hemos puesto todo nuestro foco en la creación de nuestros bebés.
Estos son: el segundo libro de Sergio, los retiros y experiencias de desarrollo personal, una academia online de preparación física y mi gran estrella polar: El viaje de la Guerrera.
Podéis imaginar que siendo un equipo de dos (ahora ya somos más), el esfuerzo energético y emocional es grande. Y la verdad es que lo hemos llevado muy bien hasta el final. Teníamos claro que ese era el objetivo: gozar de libertad y tiempo para CREAR y construir nuestros sueños desde el propósito personal.
Muchos expertos en finanzas nos habrían recomendado invertir antes de descapitalizarnos, pero nuestra gran inversión ha sido en nosotros y en nuestros dones más ocultos.
Otros viajeros nos aconsejaron visitar más lugares impresionantes que no terminamos por ver, porque queríamos construir una rutina fundiéndonos con el entorno y sentir que ese lugar era “casa”.
La familia y amigos esperaban que no volveríamos en dos años, y volvimos a las 6 meses porque fue el tiempo que necesitamos para sentar las bases de lo que iba a ser, a partir de ahora, nuestro nuevo proyecto vital.
Nuestro plan es seguir viajando y viviendo donde nos sintamos en casa. Puede ser cerca del mar, como en Portugal, donde nos asentaremos los próximos meses. Puede ser en la montaña, en Florencia, en Sudamérica o en Los Ángeles. El caso es que la decisión se fundamenta en nuestro llamado interior, no en el exterior.
LAS SOMBRAS DE VIVIR VIAJANDO
Como hemos dicho antes, hay mucho detrás de las fotos preciosas de cada destino.
*** En este episodio que grabamos Sergio y yo en conjunto (Podcast de Viajar con Alma) charlamos con otras dos viajeras que hacen lo mismo que nosotros y os contamos en detalle. Si lo estás pensando hacer algún día: yo correría a oírlo.
Viajar, emprender y disfrutar a la par requiere de una maestría personal de alto nivel. Tienes que ser capaz de autogestionarte, mental y emocionalmente. Si viajas con alguien es un desafío más, en ese sentido.
Situaciones que pueden ocurrir y para las que tienes que estar preparada (nunca lo estás):
Problemas de salud, digestivos principalmente, y no contar con un buen servicio médico.
Apagones de luz (en Sri Lanka duraban hasta 3 horas). Teniendo en cuenta que teníamos lanzamientos en directos y videollamadas constantemente de las que dependen nuestros negocios, puedes imaginarte que es muy inconveniente. 🤪
Mucho calor y humedad.
No contar con una cocina en casa.
Desabastecimiento de cosas que normalmente utilizas en tu día a día y que al no tenerlas durante meses…cansa.
Comer casi siempre lo mismo (noodles, arroz y mucha fritura y salsas).
Tráfico y polución.
Personas que te miran como si fueras una “moneda andante”. Constantemente intentando encarecer los precios, engañarte y venderte algo.
Vivir con una mochila de 50 litros y poco más. Para nosotros esto no fue un impedimento.
Estas son algunas de las situaciones normales que vives en estos países y que, al principio, son hasta divertidas.
En nuestro caso, los 6 meses fueron el umbral para comenzar a sentir que esto nos restaba. No teníamos la necesidad de buscar más desafíos para crecer personalmente, sentíamos que ya habíamos cerrado ese ciclo y estábamos preparados para algo diferente.
Y es que así es la vida, cíclica. Y por suerte, tenemos la posibilidad de cambiar de rumbo cada vez que percibamos que una etapa está a punto de acabar.
Salimos de casa en enero de 2023 sin expectativas, sin un objetivo, simplemente con la ilusión de dejarnos sorprender por el viaje. No habíamos planeado nada y estábamos abiertos a todo.
¿LA VUELTA?
Hemos vuelto de Asía más nobles y sabios, con nuestro propósito bien claro, y esto no habría sido posible sin las aventuras de los últimos 6 meses.
También hemos vuelto reforzados como pareja, reafirmando que somos un GRAN EQUIPO.
No digo que hemos vuelto a España porque la aventura continúa.
Ahora hemos pasado un mes en Cádiz con la familia, pararemos por Madrid para hacer unas gestiones y visitar los centro de entrenamiento que gestiona Sergio, nos subiremos al norte para impartir los retiros de verano y comenzaremos la temporada de invierno viviendo en Portugal. Viviendo cerquita del mar y nutriendo nuestra alma.
Espero que os inspire esta historia, y mi realidad.
Solo quiero añadir que está al alcance de cualquiera de vosotras,
y simplemente hay que tener claro el precio que estás dispuesta a pagar por tus sueños.
Mucho power y amor, guerreras.
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